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Aicrum It: 'La Región debe especializarse si quiere tener relevancia nacional como polo innovador'

Aicrum It: 'La Región debe especializarse si quiere tener relevancia nacional como polo innovador'

La 'startup' tecnológica ha creado la aplicación de telemedicina 'WeCareAtHome': "Si queremos que la sanidad sea global y accesible tendremos que confiar en estas herramientas", afirma el CEO, Ángel José Torrecillas

Detrás del sueño de ser atendido y monitorizado por el médico sin moverse de casa, hay un equipo altamente especializado como el de Aicrum It. Ese futuro cada vez más cerca plantea no pocas preguntas: cómo será la atención sanitaria del futuro inmediato y qué tecnologías nos la facilitarán son interrogantes para los que tiene respuestas Ángel José Torrecillas, fundador y CEO de Aicrum It. La empresa tecnológica desarrolla soluciones de Inteligencia Artificial, Internet de las Cosas y plataformas de trabajo colaborativo para lograr una sanidad descentralizada y accesible, pero también unas fábricas 'cero defectos' para generar productos de calidad incorporando la gestión y el reciclaje de desechos con la mirada puesta en la economía circular.

Con larga experiencia en proyectos europeos y en I+D, el emprendedor es gestor certificado de la innovación por la Asociación Española de la Calidad. Reflexiona sobre el uso y los riesgos de las tecnologías, sobre la exigencia que supone para empresas como Aicrum It, sobre financiación y sobre el potencial innovador de la Región.

¿Cómo funciona la herramienta CareMeAtHome?

La transformación digital es un reto para el ámbito sanitario. Hay un alto nivel de informatización de los sistemas dentro de los hospitales y clínicas, pero esa información no fluye bidireccionalmente hacia el paciente, que se encuentra a veces con serios problemas para acceder a sus datos.

Nuestra solución es una aplicación móvil muy sencilla que crea pequeños círculos entre el profesional y el paciente para transferir esa información de manera confidencial, encriptada y que no tenga problemas en acceder a la información.

Es una herramienta para trabajo en grupo, entre profesionales y con el usuario, orientasa al seguimiento de tratamientos y la gestión de la información del paciente.

¿Qué tecnología va a tener más demanda en la vida real de los ciudadanos en el futuro próximo?

Hoy es la Inteligencia Artificial (IA), porque cada vez se monitorizan más cosas. El Internet de las Cosas (IoT) nos ha permitido generar plataformas o herramientas que sensorizan todo. Tenemos implantes nanobots en medicina para monitorizar el corazón. En el campo de Cartagena monitorizan los árboles para conocer el grado de humedad. Llevamos los últimos 20 años generando mucha información, y ese es el caldo de cultivo ideal para desarrollar técnicas de IA que nos den datos consistentes. Ya podemos confiar más en los algoritmos. Es la tecnología que el ciudadano de a pie más va a experimentar, como sucede cuando le recomiendan la ruta más óptima en función del tráfico.  

¿A qué riesgos deberíamos estar vigilantes con esta transformación tecnológica?

Sobre todo a riesgos de privacidad. Debemos estar preocupados de cómo se gestionan esos dato, quién va a gestionarlos y si tiene permiso para gestionarlos. Vivimos una época con muchos casos de 'hackeo' de información. Hay muchas empresas que acumulan información y las sitúa en una postura privilegiada porque disponen de mejores datos para validar sus algoritmos y sistemas para hacer más atractivo el producto.

Hay riesgo importante. La UE está ahora liderando la protección de datos.

Su empresa diversifica sus productos en varios sectores, pero con una especialización considerable en el ámbito sanitario, ¿cómo ve la sanidad del futuro?

Me gustaría imaginarme una sanidad centrada en el paciente. Que el paciente tuviese el control de todo, que tenga sus datos en su propiedad, que si se va de viaje pueda tener sus datos y no tenga que estar pidiéndolos. Un sistema descentralizado de sanidad.

Tenemos la tecnología 'blockchain', aunque aún no está suficientemente madura, pero es el ejemplo de que ahora todos los sistemas se hacen centralizados, y en sanidad es el campo perfecto para plantear sistemas descentralizados de información para que sea accesible en cualquier momento y cualquier lugar.

¿No asusta que toda atención se produzca en remoto en favor del ahorro de gastos?

Es una cuestión de tiempo que se vaya implantando este tipo de sistemas. Si la sanidad quiere llegar a todo el mundo, tiene que delegar en este tipo de telemedicina. Habrá situaciones más complicadas, como operaciones, aunque ya se hacen también en remoto. Pero si queremos que sea global y accesible a todo el mundo tendremos que apoyarnos en tecnologías de este estilo.

Hay una generación mayor, con menos habilidades tecnológicas, que es precisamente la que más necesitaría estos servicios médicos accesibles, ¿herramientas como CareMeAtHome necesitan una formación previa?

Es precisamente uno de los fuertes de CareMe, que no necesita formación. En nuestro producto Senior-Fit, la aplicación móvil es casi desasistida. El usuario apenas tiene que introducir datos. Lo único que tienes que hacer es arrancarla y 'loguearse'. Todo se hace de manera automatizada. Está pensado para todo tipo de personas, incluidas las que tengan cierta dificultad en el manejo de aplicaciones móviles. Por eso nos seleccionaron en el proyecto europeo PHArA-ON para facilitar el bienestar de los mayores. Mi padre ha sido uno de los que han usado el sistema para testarlo. Recibe incluso recomendaciones de ejercicio físico en el móvil. Lo que no podemos saber aún es si lo ha realizado o no, pero podemos conocer a través de los datos de pulsaciones si ha llevado a cabo el ejercicio.

¿Humanizar la tecnología es un reto para esta nueva generación de servicios?

En estos últimos años estoy mucho más sensibilizado con este tema. Antes priorizaba hacer un código eficiente o un producto disruptivo, que logre mayor cuota de mercado y otras ventajas, pero ahora uno de los criterios que siempre tengo en mente es humanizar la tecnología y su accesibilidad.

¿Cómo sostenéis la exigencia de innovación constante en esa rueda vertiginosa que es el mercado de la tecnología?

Lo primero es mantener una vigilancia tecnológica. Cada día hay que leerse de 20 a 40 artículos de internet para saber a dónde va la tecnología.

En segundo lugar, esta empresa está muy orientada a proyectos europeos de I+D. Al mes terminamos de dos a tres propuestas, en las que participan varios tipos de organizaciones (grandes empresas, pymes, universidades, centros tecnológicos...) en diferentes convocatorias de la UE. La I+D ocupa el 40% de nuestro trabajo.

¿Es difícil ahora financiar la innovación constante, tanto en medios tecnológicos como en incorporar talento?

La financiación europea es la más óptima, con un 70% a fondo perdido y te suele dar un alto porcentaje por adelantado. No encuentras estas condiciones a nivel nacional o regional. También es la más difícil de conseguir.

A nivel regional existen otras vías de financiación, que conllevan su tiempo en los pasos de tramitación, de justificación, de solicitud de cobro y luego de pago. Son procesos muy largos, que siempre requieren la ejecución previa del proyecto y, por tanto, la inversión de fondos propios. En un proyecto europeo nos adelantan un porcentaje para contratar personal cualificado, para así reducir ese esfuerzo propio.  

¿Es escaso el movimiento de fondos privados en la Región para inyectar dinamismo en empresas de innovación?

Hay diferentes actores, en función del estado de desarrollo de tu producto. Desde Wanaseed para estados preproducto (pre-seed), pasando por Murciaban (para productos ya en el mercado), hasta MurciaEmprende.

Luego hay préstamos sin avales (participativos) desde el Info y el ICREF para proyectos escalables. No todo es susceptible de apostar por ello, pero debe haber un grupo de trabajo con criterio para apoyar proyectos. En cualquier caso, hay que diferenciar entre un proyecto escalable y un proyecto de I+D, ya que requieren diferentes tipos de financiación.

¿Qué tal la experiencia del programa de escalado para preparación de las inversión de Seimed?

Bien, estamos actualmente con el programa, que se encuentra en su fase inicial.

¿Qué esperáis obtener de la experiencia?

Con CareMe tenemos un 'partner' con el que vamos de la mano, y el objetivo es hacer una 'join venture' para que deje de ser un instrumento y comience a participar en el producto.

Este socio nos aporta accesibilidad al mercado, ya que es un hub de diferentes productos sanitarios y los ofrece a grandes empresas del sector. Nos facilita el acceso al mercado.

¿Qué deberíamos aprender de otros nodos de innovación como Madrid, Barcelona o Valencia?

Ellos tienen más posibilidades por población, por proximidad y un caldo de cultivo más amplio. En Murcia no tenemos esa densidad y lo que hay que hacer es atraer empresas de otros sitios ofreciendo una especialización.

En Murcia tenemos dos sectores muy importantes, el logístico y el agro. Hacer polos en esos dos sectores y que seamos aceleradoras de referencia a nivel nacional de 'startups' con esa temática. Vendrían empresas de 'agritech' que pueden aquí validar su producto. Hay que especializarse, porque es la única manera de tener cierta relevancia a nivel nacional. Porque repetir el mismo modelo de Barcelona es inútil, ya que no tenemos la misma capacidad. Hay que hacer polos verticales, pero no cualquiera, sino basados en nuestros puntos fuertes.

¿Cómo ve el futuro de Aicrum It?

Muy variado, por su ADN. Está destinada a no casarse con ninguna tecnología y estar en I+D en cualquier tecnología innovadora que surja para hacer productos que nos den una posición ventajosa con respecto a la competencia.

Esa alerta tecnológica constante, pero ¿de qué fuentes informativas se nutre la empresa?

Estamos suscritos al Centro Tecnológico de las Tecnologías de la Información, que tiene un programa de vigilancia tecnológica que aprovechamos. Además, tenemos líneas comunes de desarrollo en proyectos de I+D.

¿En qué proyectos de futuro está volcada ahora la empresa?

Estamos focalizados en CareMeAtHome. Y la Realidad Aumentada Virtual está en el horno, pero aún estamos por encontrar ese océano azul de utilidad. Actualmente estamos en fase de iniciar una PoC (prueba de concepto) con tecnología Blockchain para aplicarlo al sector sanitario.

¿Qué dificultades encuentra una empresa innovadora a la hora de llevar adelante sus proyectos?

Principalmente la financiación, aunque ahora estamos encontrando problemas con los recursos humanos, pero contamos con un 'pool' de profesionales colaboradores y siempre obtenemos una respuesta excelente, pero se debe a que nuestro mercado es europeo.

La financiación sí tenemos que tenerla en España. Estuvimos tentados de abrir la empresa en Estonia porque facilita al máximo todo tipo de gestiones.

¿Qué ventajas aporta el sello de Pyme Innovadora?

Te lo otorga el Ministerio cuando haces proyectos de I+D. No tenemos problema en renovarlo porque siempre tenemos un proyecto innovador en marcha.

Hay un beneficio en contratación de personal investigador. Estamos evaluando el sello EIBTde Empresa de Base Tecnológica, pero aún desconocemos qué posibles ventajas puede otorgarnos.

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LA CITA. Waykup Murcia Startup Region es un espacio de encuentro entre inversores, startups y corporaciones impulsado por las últimas tendencias en innovación y tecnología. Un foro en el que se reúnen emprendedores, fondos de inversión y empresas, donde las oportunidades se convierten en acción, el talento en disrupción y la innovación abierta nos lleva al futuro. El INFO lo organiza los días 3 y 4 de noviembre de 9 a 19 horas en el auditorio y centro de congresos de Murcia. Inscripción AQUÍ.

EL APOYO FINANCIERO. MURCIA BAN es una entidad sin ánimo de lucro, que proporciona un espacio de encuentro para 'business angels' y emprendedores con vocación global, que precisen fondos y soporte estratégico para consolidar sus proyectos. En esta red de inversores participa el INFO.

EL DATO. Más de 155 millones de consultas al año realizamos los españoles en Atención Primaria. Con la telemedicina, se calcula que sería posible evitar hasta 142 millones de visitas, lo que supondría un ahorro de más de 7.415 millones de euros al sistema sanitario.

LA FRASE. "Una persona con Apple Watch puede hacer un electrocardiograma con poder diagnóstico en cualquier lugar". Miguel Ángel Cobos, cardiólogo del Hospital San Carlos, de Madrid.

LA IDEA. China ha creado una casetas urbanas, de tres metros cuadrados, donde los pacientes pueden entrar y rellenar un formulario con sus síntomas. En la cabina pueden usar diversos aparatos diagnósticos para hacerse pruebas básicas. La Inteligencia Artificial contrasta los resultados con una enorme base de datos y, emite diagnóstico y receta, o bien llama a un especialista para que continúe la consulta por videoconferencia.